Manuel Beltrán, del Deporinter-Emotion, finalizó hoy en tercera posición la primera etapa (Erfoud Maadid-Boudnib) de la Titan Desert tras marcar un tiempo de 04:01:46, a 56 segundos del ganador y primer líder de la prueba, Roberto Heras (Phiten-Roberto Heras T.S.-Doctore Bike). Milton Ramos (Radikal Bikes Team) fue segundo y entró en meta con el jienense. Los compañeros de equipo de Beltrán también hicieron un magnífico papel en este arranque de la competición. Carmelo Asencio acabó en 21º posición a 43:49 de Heras, mientras que Rubén Bravo fue 39º a 54:26.
Beltrán lidera la categoría máster (Imagen de la web de Deporinter).
Heras y su compañero Luís Leao Pinto marcaron un impresionante ritmo desde los primeros compases, dejando atrás al resto de rivales en el paso por el primer punto intermedio tras las dunas del inicio de la especial. Con terreno limpio al frente, han empezado a poner tierra de por medio hasta alcanzar un margen de casi 8 minutos respecto al grupo perseguidor, formado por diez corredores pero que ha ido desfragmentándose a partir del kilómetro 28 en el paso por el segundo punto intermedio cuando la ruta de carrera ha tomado un tramo de pistas paralelas y pedregosas.
Con ambos corredores al frente, todo apuntaba a un final al sprint entre ambos pero a falta de unos 20 kilómetros el ganador de la pasada edición lanzaba un ataque al ver que el duo de Milton Ramos y Triki Beltrán se acercaban peligrosamente reduciendo la diferencia a tres minutos y con contacto visual sobre los líderes. Desde ese momento, y hasta la línea de meta, el bejarano se ha escapado en solitario manteniendo la ventaja en los primeros kilómetros de escapada pero cediendo terreno en los últimos compases de la especial cronometrada.
Heras ganó la Titan Desert en 2010 y 2008 (Titan Desert).
Roberto Heras cruzó la línea de meta en primera posición, tras 87,36 kilómetros, con 56 segundos de ventaja sobre Ramos y Beltrán, que lidera la categoría máster, mientras que Pinto cedía 3:52. El también jienense José Luis Carrasco (Milenio Reino de Granada-Jaén) fue décimo y Manuel Rojo (Milenio Reino de Granada-Sevilla), 13º.
"Ha sido una etapa durísima, cuando hemos visto que Milton y Triki venían muy fuerte y estábamos perdiendo el terreno que habíamos conseguido, he decidido tirar sólo para asegurar la victoria de etapa. Teníamos que tirar a muerte porque si nos cogían habríamos tenido que bajar el ritmo. Estoy muy orgulloso, ha sido una etapa muy dura pero la hemos trabajado mucho y estoy muy contento con el equipo y nuestra labor conjunta", comentaba al término de la especial el bejarano, que mañana portará el maillot rojo de líder.
En categoría femenina, la estadounidense Rebecca Rusch (Specialized) se impuso en la línea de meta con más de tres minutos de ventaja sobre la portuguesa Celina Santos Carpinteiro (Meo Team 2), mientras que la española Sandra Santanyes (Bicis Esteve) acabó en tercer lugar.
La segunda etapa (Boudnib-Talsint) de la Milenio Titan Desert by Powerade llevará mañana a los participantes al campamento maratón de Tasint, donde no dispondrán de ayuda externa de mecánicos ni fisioterapeutas y deberán valerse por sí mismos para pasar la noche. Un total de 103,32 kilómetros de especial y un desnivel acumulado positivo de 935 metros, para llegar al campamento, situado a una altura de 1.380 metros. Será la primera parte de una maratón que termina el miércoles.
La salida discurre por una pista asfaltada de 10 kilómetros en subida superando un desnivel de 200 metros. Tras salir del asfalto, la carrera tomará una pista en buen estado hasta el kilómetro 36 de la especial, donde se inicia la ascensión a un puerto por una pista pedregosa, en mal estado y algo trialera. Es quizás, el sector más técnico de la parte marroquí de la carrera: 3 kilómetros de subida complicada, donde se tendrá que poner pie a tierra en más de una ocasión.
Tras culminar a 1.236 metros de altitud, se inicia una bajada en la que el terreno mejora progresivamente hasta convertirse en una pista en buen estado. En el kilómetro 66 se toma una pista en peor estado, con un piso muy roto, y con más cambios de ritmo, hasta llegar al punto kilométrico 95 donde se tomará una pista en buen estado hasta el campamento.